La esperanza muere al último

Había una vez un escorpión que quería cruzar el estanque y le pidió a la rana montar en su espalda. La rana le dijo que no, porque la iba a picar y ambos se ahogarían. El escorpión le prometió que no lo haría y la rana cedió y lo dejó subirse a su espalda para cruzar juntos el estanque. A la mitad del camino, el escorpión picó a la rana y esta, muy triste le dijo "¿Por qué lo hiciste? ahora ambos moriremos" a lo que el escorpión contestó: "Perdóname, es mi naturaleza".